La mujer se encuentra detenida luego de las pruebas de dermotest, también un vecino, por falso testimonio, por el momento el arma no fue localizado.
Fuentes de la Policía informaron ayer que el deceso de Joaquín Alberto Pérez, de 22 años se produjo el martes en horas de la noche en el hospital Escuela, donde se encontraba en la unidad de la terapia intensiva. Trascendió que el joven tenía muerte cerebral y había pocas esperanzas de que se pudiera recuperar.
Pérez fue encontrado tirado en la vía pública, en un pasillo ubicado a pocas cuadras del centro de la ciudad, en la calle Mancini al 1500, entre Ricardi y Berón de Estrada, en la mencionada localidad del sur provincial.
Al llegar la patrulla, un vecino de apellido Espíndola salió al cruce de los uniformados para mostrarles el lugar exacto donde se hallaba la víctima, todavía con signos vitales y perdiendo mucha sangre. Al ingresar a la zona los policías lo encontraron en decúbito dorsal con gravísimas lesiones en el rostro.
No trascendieron las razones del ataque, pero a las pocas horas el fiscal, Juan Domingo Ramírez, ordenó la detención de la novia del baleado, una mujer de apellido Godoy, alias “Yuca”, quien aparentemente tenía problemas de convivencia y había discutido fuertemente con su pareja, y que vive a pocos metros de donde fue hallado el cuerpo.
Por el momento el arma no fue localizada y se realizaron allanamientos con resultados negativos. Con el paso de las horas fue detenido Espíndola, acusado de “recortar los hechos” en su declaración realizada en la sede policial.
