Fernando Ramírez, titular del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Corrientes (Suteco), advirtió sobre la falta de alimentos adecuados para los estudiantes y la desidia del gobierno en abordar la crisis alimentaria en las escuelas. Según Ramírez, los niños están subalimentados y la comida que se distribuye en las instituciones educativas carece de valor nutricional esencial.
La denuncia pone de manifiesto una situación alarmante en las escuelas de la provincia, donde la alimentación de los alumnos se ha convertido en un tema crítico. “Hoy hay un déficit importante en la parte alimentaria. Nosotros siempre fuimos muy críticos porque en principio creemos que nuestros alumnos, independientemente de su condición social o del lugar donde provengan, deben recibir una buena alimentación”, mencionó Ramírez, subrayando la preocupación constante del sindicato por la nutrición infantil.
Además, Ramírez destacó la falta de proteínas y productos frescos en los menús escolares, lo que contribuye a la subalimentación de los estudiantes. “Faltan proteínas y productos frescos en los platos de nuestros chicos”, aseguró, enfatizando la necesidad urgente de mejorar la calidad de los alimentos ofrecidos en las escuelas.
El problema alimentario se suma a las preocupaciones salariales del sector docente. “Hubo una recomposición, pero estamos bastante lejos de la línea de pobreza”, señaló Ramírez sobre la reciente actualización salarial docente. “Estamos con una paritaria nacional que se rechazó los 400.000 pesos que ofreció el Gobierno Nacional como piso. En Corrientes estamos por encima de ese piso, pero tenemos que lograr algunas metas. Estamos prácticamente rozando la indigencia con el salario inicial; el de máxima antigüedad no supera la línea de pobreza, por lo tanto, me parece que hay mucho para trabajar en el tema salario”, añadió el secretario general de Suteco.
Con un salario inicial de $470 mil y una línea de pobreza que alcanza casi los $800 mil, Ramírez insistió en que las recuperaciones salariales y las indexaciones inflacionarias están lejos de ser suficientes. “Hoy estamos en $470 mil el salario inicial y la línea de pobreza está casi llegando a los $800 mil. Estamos bastante lejos. Por eso todas las recuperaciones que se van haciendo, indexaciones a partir del índice inflacionario, están en este contexto de estos últimos seis meses”, explicó.
Ante este panorama, el sindicato hace un llamado urgente al Gobierno Nacional y Provincial para que atiendan la problemática alimentaria en las escuelas y mejoren las condiciones salariales de los docentes. Ramírez subrayó la importancia de establecer mesas de negociación efectivas que aborden tanto las necesidades alimentarias de los estudiantes como las reivindicaciones salariales de los trabajadores de la educación.