Mientras la controversia institucional causada por la designación en la plana mayor de la Policía de Corrientes del comisario general Sergio Rubén Sánchez procesado por abuso sexual, el expediente ha tomado renovado impulso y se espera que antes de fin de mes haya novedades importantes.
En 2020 cuando el juez que entiende en la causa, doctor Néstor Oscar Anocíbar, procesó a Sergio Rubén Sánchez lo hizo por “abuso sexual simple” sin ningún tipo de agravante pese al contexto en el que se habría producido el hecho de que estaba dando el grado suficiente de certidumbre como para cerrar la instrucción y enviarlo a juicio.
Es que de acuerdo a la denuncia efectuada en 2017, los presuntos ultrajes que habría padecido la víctima -una cabo de la misma fuerza de seguridad- fueron en las instalaciones de la comisaría de Villa Olivari, de la cual Sánchez era titular, y particularmente en el despacho del acusado. Fuentes judiciales, consultadas al respecto por este matutino, confirmaron que en el procesamiento al cuestionado agente policial no hay agravantes ni por condición de superior respecto a la presunta víctima, ni por el lugar donde se produjo y ni por el hecho de ser miembro de la Policía.
Este detalle no es menor ya que de permanecer de esta manera la carátula y llegar a juicio, en caso de una condena la pena máxima prevista es 4 años, y por regla general los castigos de 3 años o menos de prisión no se efectivizan sino que son de cumplimiento en suspenso. Es por ello que una vez superada la instancia de suspensión de juicio a prueba, solicitada por la defensa de Sánchez, podrá avanzarse a menos clara que el beneficio sea otorgado, para lo cual debe contarse con la anuencia explícita de la denunciante.
De no prosperar la probation, será la Cámara de Apelaciones la que deba resolver sobre el procesamiento o no de Sánchez, y podría reformular la calificación del delito si así lo considerara ya que está en sus facultades.