El hecho fue el martes pasado cuando al menos tres sujetos armados irrumpieron en el surtidor y amenazaron a los empleados que salieron corriendo. Luego se llevaron el dinero de la caja registradora.
La Policía de Corrientes informó ayer sobre la aprehensión de dos sujetos sospechados de haber tomado participación en un asalto cometido en una estación de servicio de Santo Tomé. Además de las detenciones, se reportó el secuestro de elementos vinculados a un hecho delictivo perpetrado en la madrugada del martes.
Fuentes oficiales reportaron ayer que efectivos de la comisaría 1ra de Santo Tomé tras “una ardua y rápida labor investigativa” lograron localizar y aprehender a dos hombres y al secuestro de prendas de vestir que podrían guardar relación con el ilícito. No obstante, la cifra de dinero sustraída -estimada en $200.000- aún no fue recuperada. “Todo lo secuestrado en principio estaría vinculado a un supuesto hecho delictivo que se habría registrado en horas tempranas del pasado 10 de mayo en una estación de servicio, ubicado en inmediaciones de las calles Irigoyen e Independencia, de esa localidad”, explicaron los informantes.
El procedimiento de detención lo llevaron a cabo dichos agentes en las últimas horas del martes y ayer a la madrugada luego de los trabajos investigativos realizados y que se dieron inicio después de tomar conocimiento del hecho. Con los elementos de pruebas recolectados, se solicitaron órdenes de allanamiento las cuales fueron diligenciadas en tres diferentes domicilios, donde secuestraron una motocicleta marca Honda 125 y prendas de vestir varias, todo ello vinculado a lo investigado. “Asimismo, se procedió a individualizar y aprehender a dos jóvenes, de 19 y 26 años de edad, este último alias ’Gordo’, ambos relacionados prima facie con el presente ilícito y quienes junto con todo lo secuestrado, fueron puestos a disposición de la Justicia”, detallaron las fuentes.
El atraco se produjo alrededor de las 5 cuando tres sujetos, uno de ellos portando un arma de fuego, irrumpieron en el surtidor de combustible y ahuyentaron a los empleados, que atemorizados corrieron hacia otro comercio cercano desde donde alertaron a la Policía. En simultáneo los delincuentes forzaban la oficina y se llevaban el dinero que había en la caja registradora y que era resultado de la recaudación de la jornada para luego irse en motocicletas.
