Es una medida preventiva que faculta a la misma institución a la aprehensión por cinco días de agentes para que la Justicia actué.
Desde la Jefatura señalaron de que es una decisión que se toma en los hechos “demasiado graves” y para evitar que el acusado “haga quilombo” con los vecinos que lo denunciaron. Por lo que el sargento ayudante Julio César Caballero fue trasladado a una repartición capitalina.
Por un lado hay una causa de índole administrativa que tiene varias sanciones posible, que van desde la suspensión sin goce de sueldo, hasta la exoneración. En este caso Caballero, con 25 años de servicio, podría darse el retiro para evitar mayores gastos para el estado.
Hay una causa en la justicia por lesiones leves y abuso de arma de fuego, en la que no se incluye amenazas, lo que en los videos que circularon se puede advertir.
Por su parte una de las hijas del acusado señalaron de que su padre “nunca realizó ningún disparo, lo están difamando”.
El hecho se registró el sábado a la tarde cerca de las 18.30 en un campeonato en el que participaron tres equipos de diferentes barrios; se estaba realizando en un descampado ubicado a un costado de calle José Ferrau. El personal policial tomó conocimiento del incidente primero por la denuncia de una joven de apellido Ramírez de 21 años quien señaló que el partido entre los dos equipos en uno de los cuales estaba el supuesto agente de apellido Caballero se estaba poniendo “picado” y habían comenzado con juego brusco donde no faltaban los codazos y los puntapiés. Es así que en un momento la joven denunciante relató que se tuvo que suspender el partido porque en la cancha se estaban peleando los jugadores. En ese contexto ella se había agarrado a golpes de puño con un familiar de Caballero una joven de la misma edad, que en un momento le agarró del pelo, y recibió alguna que otra trompada pero nada de gravedad. La denunciante señaló que en ese momento es cuando escucha los disparos de arma de fuego, “mas de uno” que la dejó paralizada y cuando miró de dónde venían los estruendos, pudiendo ver a Caballero “a quien conoce como policía”, que estaba con una 9 milímetros amenazando a todos sus contrincantes, entre los que estaba ella. Ella se retiró del lugar y realizó la denuncia que derivó en una causa caratulada como “lesiones leves y abuso de arma de fuego”.
En las redes sociales circularon videos realizados por personas que estuvieron en el lugar. En las filmaciones se lo puede ver a Caballero empuñando el arma realizando disparos al aire a la vez que le gritaba a los contrincantes que comenzaron a retroceder, otros que pudieron corrieron poniéndose a resguardo. Los familiares de Caballero, entre ellas mujeres, también seguían insultando y desafiando a los oponentes quienes le decían que “hay chicos” no dispares. Por suerte no hubo que lamentar heridos graves solo algunas mujeres y hombres con algunos golpes de puño pero nada grave.
Trascendió que el acusado no sería la primera vez que la hace, ya que “no le gusta perder”, decían.
