Unos niños, no mayores de 13 años, causaron un revuelo al publicar un video en el que generaban un “lanzallamas” con un aerosol de alcohol y un encendedor dentro del aula.
En las imágenes quedó registrado el momento en que uno de los alumnos -que ya había llegado munido de un encendedor- incitó a una compañera a realizar la prueba, pero ante la negativa la señaló con el término de “maricona”.
Seguidamente el muchachito presionó el dosificador al tiempo que encendió el mechero, generándose así una gran llama.
Hecho esto, otros compañeros vitorearon la hazaña mientras indicaban a otros que vigilaran “que no venga el profe”.
Y, ya con una vigilancia montada, el mismo jovencito procedió a encender el fuego dentro del aula, ante los demás alumnos.
Todo quedó captado en un teléfono celular, de un chico que, cómplice de la situación, tenía como plasmar en una prueba la proeza de su compañero.
Luego de que se hizo viral el video, las autoridades del colegio Monseñor Roubineau emitieron un comunicado en el que dieron a conocer que identificaron a quienes aparecían en las imágenes.
“Ante el requerimiento de distintos medios locales de las imágenes viralizadas recientemente en redes sociales, informamos que la institución intervino inmediatamente en la atención del caso con los alumnos involucrados y sus familias”, expresa el comunicado.
“Por otra parte, cabe señalar que la sanción disciplinaria aplicada va acompañada de espacios de mediación, orientados a atender y promover la reflexión y la toma de conciencia en nuestros estudiantes, en relación al valor del cuidado de la vida, entendiendo que una acción no pensada puede poner en riesgo la integridad personal”, agrega.
Y termina: “Nuestra responsabilidad continúa centrada en la formación integral de los estudiantes, atendiendo al contexto en el que desarrollamos nuestro servicio educativo y adecuando las prácticas a los emergentes sociales. La prioridad frente a estas situaciones es trabajar integralmente con los jóvenes y sus familias”.
El episodio ocurrió días después de que en otro colegio católico un grupo de jóvenes se registró en un video mientras organizaba peleas en un baño, y donde, además, apostaban.
En ese caso los directivos de la institución -colegio San José- evitaron hacer declaraciones sobre el tema, y tampoco emitieron un comunicado oficial.
Una vocera de la institución se limitó a dar entrevistas telefónicas, en las que aseguró que hubo sanciones a un grupo de alumnos, pero que éstos no serán expulsados de la institución.
El “club de la pelea” tiene su sede en una escuela correntina
