Tres hombres fueron condenados a penas de hasta 18 años de detención por haber tomado como rehén a una familia durante un asalto en el que, además, torturaron al dueño de casa cortándole la oreja, abusaron de su esposa y apuntaron con un arma a la cabeza de un bebé, en la ciudad correntina de Esquina.
El Tribunal de Juicio de la ciudad de Goya, integrado por los magistrados Julio Duarte, Jorge Carbone y Ricardo Carbajal, impusieron las penas al trío de delincuentes acusados robo agrabado por el arma de fuego.
En las sentencia los jueces impusieron la pena de 18 años de cárcel a Javier Armando Almirón, responsable del delito de robo agravado por el uso de armas y de haber abusado sexualmente de una de las víctimas.
Se lo señaló también como el que torturó al dueño de casa con un cuchillo, con el que le cortó la oreja.
Fue declarado reincidente por segunda vez ya que había cumplido condena por otros delitos.
En tanto, Alejandro Ortíz Giménez y Roberto Catalino Barría fueron condenados a nueve año de detención por el robo.
Los tres serán trasladados a la Unidad Penal 1 de corrientes, donde deberán cumplir la condena.
Están acusados de haber irrumpido en la casa de un abogado el pasado 15 de agosto en horas de la madrugada.
Los maleantes entraron por la ventana y una vez en el Interior despertaron a golpes al dueño de la casa y a su esposa. Los maniataron y tuvieron de rehén. También privaron de la libertad a los tres hijos de la pareja.
El hecho ocurrió en una casa ubicada en la calle Hernández al 800, a las afueras de la ciudad.
Luego de tomar de rehén a la familia torturaron al hombre, golpeándolo salvajemente y cortándole la oreja con un cuchillo.
Uno de ellos, además de golpear a la mujer, intentó someterla sexualmente.
Además, golpearon a uno de los niños y a otro le pusieron un arma en la cabeza para obligar al padre que entregue dinero.
Finalmente, luego de cuatro horas de torturas y sometimientos, los ladrones se fueron con una importante suma de dinero, una consola de videojuegos, teléfonos celulares y otros elementos de alto valor.
En un auto huyeron de ese lugar, donde existe un complejo deportivo que es el emprendimiento de la familia Fernández Codazzi.
“Uno de ellos tenía una pistola y dos, tenían cuchillos tipo faca, como machetes afilados, pero con mangos caseros” relató la víctima.
Luego de una semana de investigaciones los tres sospechosos fueron encontrados en tres barrios periféricos de la ciudad de Esquina.
El principal imputado, es el hijo de una mujer que trabajaba como doméstica en la casa de la familia atacada.
