Por: Mauro Alvez
(Periodista. Analista político)
La verdad, les confieso, que hace mucho quería empezar a exponer a quienes mienten compulsivamente para generar algún pequeño “rédito” político o llevar agua para su chacrita.
Quizás, precipitadamente, la concejala Ana Miño de Encuentro por Corrientes, me obligó a ejercer la obligación moral de los comunicadores de dejar en claro las cosas y no con relatos y fantasías como algunos colegas (a los cuales respeto y no juzgo) deciden hacer, sino con datos duros irrefutables y esa es la intención de esta columna.
Resulta que en la última sesión del Concejo Deliberante, la edil Miño leyó textualmente la Resolución N°251 del Departamento Ejecutivo Municipal y dejó mucha tela para cortar, no de la Resolución en sí, sino más bien de su alocución la cual pondero y destaco como una gran fortaleza; tiene muy buena oratoria.
Por favor, lector, lectora, sepa comprender que deschavar en este caso, a Ana Miño, no es un ataque hacia ella como persona a la cual respeto como a cualquier otro ser humano, sino más bien, me sentí interpelado por el editorial del día Lunes de Gabriel Link en donde dijo que somos los periodistas lo que tenemos que ponerles límites a los dirigentes políticos. Adhiero hasta el más mínimo detalle de eso. Por ello, como soy un convencido al extremo de que el dato mata el relato, vengo a compartirles un par de detalles que la concejala Miño olvidó mencionar en su uso de la palabra en el Recinto del Honorable Concejo Deliberante.
Párrafo aparte, no sé porqué, pero pareciera que es requisito sine qua non tener amnesia temporal en la duración de cada sesión. Sino, no tiene explicación que usen el dedo acusador ante prácticas que ellos, cuando fueron gobierno durante 12 años, hicieron y, peor aún, entre gallos y medianoche, con el descaro que representó, representa y representará siempre Encuentro por Corrientes, quienes gobiernan Corrientes hace 25 años sin mejorar un solo indicador social.
Primero, quiero refutar la primer parte de su alocución:
– Mientras leía los Considerando de la Resolución, la concejala omitió recordar los viajes de ex funcionarios municipales como Eduardo Vischi a Europa, “Mimo” Ferrer a Estados Unidos como veedor de las elecciones que enfrentaron a Hillary Clinton y Donald Trump, el viaje de una talentosísima artista plástica libreña a China, o José Sincovez a Francia por un tema relacionado a acordeones. Dudo seriamente que se haya escandalizado ante esas resoluciones (si es que existieron).
– Mientras continuaba escuchando a Anita, me puse a pensar en la funcionalidad de cara a la comunidad de la Escuela de Gobierno, e hice lo que haría cualquier persona que no querría ser deschavada en sus falaces afirmaciones. Y resulta que la Escuela de Gobierno no sólo beca a funcionarios (lo cual está perfecto) en distintas capacitaciones y diplomaturas específicas de su función con el fin de mejorar su desempeño (hecho que ocurre en el Estado, en cualquiera de sus estratos) sino que también, beca a agentes y empleados municipales, cosa que Ana Miño también olvidó mencionar.
Para destacar algunas cuestiones:
La Diplomatura en Gestión Municipal, forma parte de un acuerdo celebrado con la UTN-BA, Centro De E-learning y la Municipalidad de Paso de los Libres. Participaron de la misma once funcionarios, directores y secretarios de la Municipalidad. La diplomatura tuvo una duración de doce meses y fue totalmente virtual.
Dentro de la Escuela de Gobierno se realizan distintas formaciones, tanto para agentes como para jerárquicos; entre ellas las siguientes:
-Capacitaciones sobre Autismo, de redacción de notas y memos, de oratoria, de Computación, de Atención a la ciudadanía, “Aprendiendo a trabajar en equipos de trabajo”, Ceremonial y protocolo en las organizaciones, Big Data: Haciendo hablar los datos y otros; que forman parte de los objetivos de la gestión con la finalidad de perfeccionar las acciones relativas al trabajador municipal.
Cabe recordar que el Nexo Universitario y Centro Educativo, dependiente de la Dirección de Educación nucleada por la Secretaria de Desarrollo Humano y participación, cuenta con varios convenios realizados con Universidades Nacionales, públicas y privadas, además de otras instituciones y organismos que procuran la formación de la administración pública. Lo único que falta es que Anita se enoje con Ascúa por becar a más de ciento cincuenta alumnos universitarios que cursan más de quince carreras GRATIS en el NUCE, porque en sus doce años de gobierno ECO no tuvo la más mínima intención de ampliar la oferta universitaria, o que se escandalice porque Ascúa con fondos del erario público brinda cursos en la Escuela Municipal de Artes y Oficios en un convenio realizado con la Universidad Popular del Chaco a más de ochocientos libreños y libreñas.
Volviendo al eje, de estos cursos, celebrados en convenios, surgen los siguientes datos:
-Capacitaciones para Agentes: primer grupo 38, segundo grupo 15.
-Capacitaciones sobre Autismo: 170 personas.
-Capacitaciones y talleres de redacción de notas y memos: 25 personas.
-Taller de oratoria: 32 personas (se está dictando actualmente).
-Taller Básico de Computación: 68 personas (se está dictando actualmente).
-Curso Atención a la ciudadanía: 9 personas.
-Curso Aprendiendo a trabajar en equipos de trabajo: 5 personas.
-Curso Ceremonial y protocolo en las organizaciones: 12 personas.
-Curso: Big Data: Haciendo hablar los datos: 3 personas.
Algunos de estos cursos son abiertos a toda la comunidad y otras, sólo para agentes municipales. ¿Adivinen que? TODOS son becados por el Estado Municipal.
Siguiendo, para continuar derribando los argumentos de Ana Miño, me llamó la atención otra parte de su alocución:
– Cito: “… Y estaría muy bien que se le pague una capacitación a los agentes municipales para que también tengan el derecho QUE AHORA SE TIENE EN CUENTA DE PODER ASCENDER O PASAR A PLANTA PERMANENTE.” En esta oración, Ana Miño borra con el codo lo que escribió con la mano el 29 de julio a las 18:09, cuando adhirió al comunicado del bloque de Concejales de Encuentro por Corrientes que fue publicado en su página oficial. ¿Acaso no dijeron que, y cito nuevamente parte del comunicado, “en las gestiones de los ex intendentes Verón, Vischi y Tarabini no sólo se regularizó la situación laboral de cientos de agentes municipales”? ¿Pasaban a planta o no pasaban a planta? ¿Si “regularizaron” la situación laboral del personal contratado, por qué la gestión de Ascúa pasó a planta a empleados con 15, 17 y hasta 20 años de contrato? ¿No deberían haber pasado a planta hace tiempo cuando “Verón, Vischi y Tarabini (…) regularizaron la situación laboral de cientos de agentes municipales?. ¿Ve, estimado lector, estimada lectora? Eso es un relato. Y el comunicado continúa, diciendo y cito nuevamente “es muy importante señalar que fue la gestión de Ascúa la que recurrió a la justicia para degradar la condición de un gran número de trabajadores de la Comuna y así, posteriormente y en varios casos, ejecutar su despido”.
Quizás, Ana Miño olvidó mencionar que el mismísimo Superior Tribunal de Justicia dictaminó que el “pase” a Planta Permanente de 150 empleados de Raúl Tarabini (como dije en párrafos anteriores, entre gallos y medianoche como suele suceder) fue “lo que en rigor la nueva administración municipal impugna es la regularidad de esas designaciones, puesto que -a su modo de ver- fueron realizadas sin concurso público de antecedentes, de forma desordenada y arbitraria, violatoria del principio de legalidad y de igualdad ante la ley” y sentencia, el Ministro Doctor Rey Vázquez en su fallo a favor de Ascúa “habilita a la administración actual a revocar el pase a planta otorgado por la anterior gestión.”. ¿Ven lectores y lectoras? Eso es otro relato de Ana Miño.
– Ante los gritos de ¡vergüenza, vergüenza!, Miño faltó a la verdad ya que, al haber un convenio celebrado, los funcionarios no recibieron un sólo peso, sino que fue la UTN-BA quien recibió el pago en concepto de Beca. Dudo de que haya estado convencida de lo que decía ya que, en el recinto, nadie más empapada de las cuestiones académicas como la Contadora Pública Nacional Ana Faustina Miño, quien ejerce la docencia.
– Cito: “La gente hace surcos ahí abajo y en Acción Social y acá en el Concejo Deliberante pidiendo un pasaje por salud, pidiendo una lata de leche, nunca hay, para la gente nunca hay, pero los señores se dan el lujo de becarse.” Aquí también me detuve a reflexionar. Primero quiero deschavar la parte de Acción Social y “ahí abajo” que presupongo que será alguna parte del Palacio Municipal. Miño, y vuelvo a referenciar a párrafos precedentes, ejerce la amnesia obligatoria (porque no creo que ignore estos datos) que es la gestión de Ascúa la que auxilia permanentemente al Hospital Regional San José, (que cuenta con departamento de asistencia social) en la compra de medicamentos, el pago de estudios de alta complejidad, el otorgamiento de anteojos, es la gestión de Ascúa la que gestiona pasajes para las personas que deben tratarse en otras localidades porque la salud pública y privada de la ciudad de Paso de los Libres, muchas veces, no está a la altura. También, Miño “olvida” o no quiere mencionar que Acción Social entrega toneladas de comida a más de 1.000 familias que no son alcanzadas por la delegación local de Desarrollo Social de la provincia. La administración de Ascúa asiste indirectamente de forma alimentaria a un sinfín de libreños y libreñas que se alimentan en comedores, merenderos y copeos que estos últimos reciben, permanentemente, provisiones por parte de Acción Social. Que fue la Acción Social de Ascúa que le dio monoambientes de material, con chapas de zinc y conexión eléctrica y de agua a personas en hipervulnerabilidad y que nunca más se vio una casa hecha de madera de tapa, con techos de chapas de cartón, con puerta y sin ventanas. Quizás por eso, Monica Pedascoll mira para otro lado cuando se menciona porque no creo que pueda borrar de sus retinas cuando le dio “dignidad” a una abuela de San Salvador.
Pero me quedó picando algo más: Menciona que la gente también va al Concejo Deliberante a pedir cosas a los Concejales. ¿No puede, Miño, con los $5.972.545,90 (pesos cinco millones, novecientos setenta y dos mil, quinientos cuarenta y cinco con noventa centavos) que percibió en estos cuatro años en concepto de salarios, viáticos y movilidad, gastos de representación y ayuda social colaborar con esa “gente que hace surcos”?. Quizás el “nunca hay, para la gente nunca hay” sería una respuesta genérica y automática por parte de su bloque, realmente no lo sé.
– Luego, contradiciéndose, dice que “Está muy bien que se capaciten y más teniendo en cuenta los objetivos que tiene esta diplomatura, por ejemplo, ¿No?: Mejorar su desempeño en el desempeño y desarrollo de actividades, el control y la transparencia”. ¿Al final?. Aquí otro relato, estimado lector, estimada lectora.
– Acto seguido dice que “Estuve muy en duda en si traerlo esto al recinto porque esto degrada, justamente, a los que estamos actuando en política y después nos ponen a todos en la misma bolsa. No somos todo lo mismo señores.” No, sabemos a la perfección que no son todo lo mismo, de hecho, esos 11 funcionarios tienen una diplomatura de la UTN-BA en Gestión Municipal que los 6 integrantes del bloque de ECO no. Eso no degrada, sino que todo lo contrario, mejora la calidad de los funcionarios como prestadores de servicios públicos, que en definitiva es lo que son.
Digo, reflexionando junto a ustedes, ¿Desde cuando vale todo en política? ¿Desde cuándo está mal que el Estado busque la mejora y profesionalización de quienes desempeñan cargos públicos? ¿Qué generó tanto enojo en Ana Miño? ¿Acaso estará ya en modo campaña? ¿No era, Ana, que en el Recinto no había que hacer política?.
Sinceramente, no tengo las respuestas a estas preguntas quizás retóricas, pero si me deja muy tranquilo saber de que lado de la mecha uno se encuentra, desde que concepción observa la vida, con cuanta empatía, con cuanta pasión.
No olvidemos que este mismo bloque impidió por meses poder avanzar con el PROCREAR desde la comodidad de sus caserones, este mismo bloque representa al sector político que gobierna hace 25 años y no mejoró un solo indicador social en la provincia de Corrientes y que la concejala que la miraba atenta a la izquierda del video, mientras Ascúa anunciaba la construcción del primer “Centro Odontológico Municipal” le escribía al entonces presidente del Concejo, Wilfredo Collinet, que “No hay que aprobarles un Hospital Paralelo, hay cosas más importantes que gastar”.
La conclusión a la que llego, es que al fin están realizando grandísimos esfuerzos intelectuales, pero están, para decirlo en francés, razonando fuera del tarro. Sería ideal que realizaran estos mismos esfuerzos intelectuales en proyectos de ordenanzas, gestiones o ayudas sociales que le mejoren un poquito más la calidad de vida del libreño y de la libreña. Pero la vida es como es y no como debería ser.
