El sangriento ataque ocurrió porque los criminales querían sacarle la mochila con el celular.
El damnificado, Luis Miguel Rojas, señaló: “Me cortaron la panza y me salió la tripa para afuera”, y relató que por el momento no puede volver a trabajar, ya que no puede hacer fuerza.
Del hospital Escuela le dieron el alta hace siete días, y en estos momentos no cuenta con medios para asegurar su subsistencia, ya que se encuentra incapacitado para volver a realizar las changas con las que se ganaba la vida.
Joven con siete puñaladas pelea por su vida
El muchacho fue atacado el martes 20 de julio por la noche en el barrio Patono, en la ciudad de Corrientes, en las calles Facundo Quiroga y Sebastián Gaboto. Por el hecho están detenidos cuatro sospechosos.