Los enfermeros que trabajan en los hospitales realizaron una nueva jornada de protesta para visibilizar la precarización laboral en el ámbito de la salud publica en Corrientes.
La concentración fue frente al hospital escuela José de San Martín, en la avenida Tres de Abril y Mendoza de la ciudad de Corrientes, donde se concentra la atención a pacientes de toda la provincia que padecen traumatismos graves.
Un centenar de profesionales de la salud, apoyados por los sindicatos de trabajadores estatales de la provincia y del estado nacional, desde las 11 expusieron la realidad por la que atraviesan los profesionales ante los automovilistas que circulaban por vía de tránsito que culmina en el puente interprovincial General Manuel Belgrano.
Desde allí caminaron al microcentro capitalino, hasta el Ministerio de Salud de la Provincia donde pidieron ser recibidos por las autoridades, pero la petición fue desatendida.
El día lunes se habían manifestado frente al hospital Vidal en el marco de las medidas de acción de reclamo.
Esta movilización se da mientras el Gobierno de Corrientes profundiza la crisis sanitaria al dejar sin empleo a profesionales de la salud. Los trabajadores reclaman ser incorporados como dependientes del Estado. Actualmente cobran entre 6.000 y 15.000 pesos por mes, en negro, seguros, ni vacaciones.
En plena crisis sanitaria por la pandemia de coronavirus, el Gobierno de Corrientes, administrado por la alianza Encuentro por Corrientes deja sin trabajo a enfermeros que trabajan en hospitales públicos, hecho que genera graves dificultades en la atención en esos centros de salud, al tiempo que incrementa los índices de desocupación, justo en esta jurisdicción que se halla entre las más pobres del país.
Los despidos se dan después que los asistentes sanitarios iniciaron, a partir de mediados de junio, intensificaron las acciones de lucha en reclamo de regularización laboral y en pedido de incrementos salariales.
Los reclamos ya habían iniciado el año pasado, cuando inició la crisis sanitaria por el coronavirus y quedó al desnudo la escasa cantidad de personal capacitado para la atención de pacientes que transitan la enfermedad. Entonces, el mismo gobernador, Gustavo Adolfo Valdés, había prometido “contratos” para incorporar más profesiones, pero esto aún no se cumplió.
En cambio, lo que piden ahora los profesionales de la salud es que los incorporen como trabajadores estatales con todos los derechos que les corresponde como tales.