Las autoridades de aquel país alertaron sobre casos de la enfermedad. Preocupación por la posible expansión de la enfermedad a territorio argentino.
Un nuevo brote de fiebre amarilla en Santa Catarina, Brasil, provocó el alerta en las provincias fronterizas de Corrientes y Misiones, así que los municipios deberán realizar informes mensuales de avistamiento y conductas de monos aulladores en la zona y el estado de salud de los mismos.
Es por ello que se brindó una capacitación sobre la notificación y el registro de salud, a cargo de los coordinadores del programa nacional Control de Enfermedades Zoonóticas, dependiente del Ministerio de Salud de la Nación, Laura Geffner y Emilio Faro. Estuvieron presentes la directora de Enfermedades Vectoriales y Zoonosis, Lilian Persíncula, la referente del programa provincial de fiebre amarilla, María Teresa Ayala, y representantes de los municipios que deben controlar el brote, entre ellos, Paso de los Libres.
La fiebre amarilla es una enfermedad viral que se transmite al ser humano por la picadura de un mosquito, generalmente del género Aedes (los mismos que transmiten zika, chikungunya y dengue). La razón por la que debe observarse el comportamiento de los monos es que se avisten en la cercanía de las poblaciones, porque los monos aulladores pueden ser reservorio del virus, que luego es transportado por el mosquito e infecta al humano al picarlo.
Cabe aclarar que no hay una transmisión directa del mono carayá al humano, pero si son muy sensibles al virus sufren un alto grado de mortandad cuando están infectados, por eso se los considera centinelas para la detección temprana de este virus en una región.