El artefacto estaba activo y la familia de la zona rural lo había encontrado hacía un tiempo sin saber de que se trataba. La dueña de la casa le pasaba lustra mueble casi a diario, por lo que el artefacto estaba brilloso, mejor que nuevo, sin saber que una caída podría haber provocado una explosión. Fue retirado por personal especializado.

Personal policial de la delegación del Priar de Esquina, junto a bomberos, retiró una bomba de mortero que estaba en un domicilio de esa localidad. El comisario Manuel Nosmor estuvo a cargo. Un periodista local señaló en sus redes que al “mortero” lo tenían como “souvenir”. Se supo que fue encontrado por chicos que jugaban en un “potrero de vacunos”, que lo llevaron a su casa.
Luego de constatar que se trataba de un material muy peligroso, se lo retiró en una caja de cartón, por no contar con el contenedor especial, y lo llevaron hasta la comisaría de Esquina, hasta donde llegó el personal especializado de Bomberos de la Policía de Corrientes, de la capital, que procedió a desactivarlo.